La fecha de muerte de dos trascendentes autores de todos los tiempos dio cimientos a la conmemoración de un día importante para la literatura. Cervantes Saavedra y William Shakespeare fallecieron en el 23 de abril de 1616 y esta fecha fue escogida por la UNESCO para celebrar el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor, que a partir del 1995 se festeja año con año.
La iniciativa de dedicar un día al año a homenajear los libros nació en 1926, cuando el editor Vicente Clavel presentó una propuesta a la Cámara Oficial del Libro de Barcelona para festejar el libro y ésta hizo eco de ella. Más tarde la tradición se afirmó en España y comenzó a extenderse; para 1964 la adoptaron todos los países de lengua castellana y portuguesa, y en 1993 también la Comunidad Europea.
Ya en 1995 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), establece formalmente el 23 de abril como el “Día Mundial del Libro” junto con el agregado sobre el “Derecho de Autor” propuesto por Rusia. Actualmente 90 países están incluidos en la celebración, incluyendo Irlanda y Gran Bretaña, aunque estos lo celebran el 14 de marzo.
En Cataluña, España, el Día Mundial del Libro se festeja regalando una rosa al comprador de alguna obra pues se dice que un periodista andaluz paseaba por las Ramblas de Barcelona cuando se tropezó de pronto, a la altura del Mercado de la Boquería, con un colega catalán, que, antes de saludarlo, le ofreció un libro y una rosa.
México y la lectura
En México las celebraciones también se hacen presentes desde 1996 pues varias instituciones participan con programas de actividades; sin embargo, en muchos estados de la República Mexicana no se le da la importancia debida a este día.
Datos de la UNESCO estiman que sólo el 2 por ciento de la población en el país lee, lo cual resulta un tanto desalentador si se toma en cuenta que Japón tiene el primer lugar con 91 por ciento de lectores, Alemania 67 y Estados Unidos el 65, siendo el segundo y tercer lugar respectivamente.
De 108 países enlistados, México se encuentra en el número 107 en cantidad de lectores voluntarios.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Lectura del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes del 2005, las edades en que las que se lee más, oscilan entre los 6 y 22 años, una edad escolar, donde la lectura es obligatoria, más no voluntaria.
En cuanto a otra encuesta realizada por la “Encuesta Nacional de Lectura 2006”, en nuestro país el 43 por ciento de los ciudadanos acostumbra leer textos escolares; 22 por ciento libros de historia; 19 por ciento gustan por las novelas; 16 por ciento consultan libros de superación personal; 15 leen biografías; 14 enciclopedias; 13 por ciento frecuenta libros científicos y técnicos; 11 por ciento cuentos y 9 por ciento libros religiosos.
El mejor festejo en nuestro país estaría en fomentar la cultura y el amor y gusto por la lectura ya que son pocas las personas que son afectas a leer libros.
